LA ÚLTIMA MUJER EN SU VIDA

John Levering Benedict III tenía en todos los órdenes más que la mayoría de los hombres. Más dinero, más mansiones, más coches y, sobre todo, más mujeres, incluyendoo tres ex esposas con muy poco en común entre elllas salvo sus físicos extraordinarios. Para Ellery Queen el problema consistía en saber cuál de esas bellezas había destrozado el cráneo de Benedict con un trozo de hierro. Las pistas eran muchas, pero encerraban también muchos enigmas. Un vestido de noche, un par de guantes de mujer blancos y una peluca femenina de color verde. Todo ello había sido dejado en la escena del brutal crimen. Pero ¿por quién y con qué objeto? Ellery sabía que eran todas piezas de un macabro rompecabezas. Pero ignoraba qué extraña figura iba a surgir cuando lograse reunirlas en orden. Un Ellery Queen totalmente distinto y superior al de sus mejores obras.